Definiciones
- Se refiere a un medicamento que se usa para calmar o relajar a una persona. - Describir una sustancia que reduce la ansiedad, el estrés o la excitación. - Hablar de un medicamento que induce el sueño o la somnolencia.
- Se refiere a un medicamento que se usa para calmar o reducir la ansiedad en una persona o animal. - Describe una sustancia que tiene un efecto calmante sobre la mente y el cuerpo. - Hablar de un medicamento que puede inducir el sueño o la relajación.
Lista de similitudes
- 1Tanto los sedantes como los tranquilizantes son medicamentos que tienen un efecto calmante sobre la mente y el cuerpo.
- 2Ambos se pueden usar para tratar la ansiedad, el estrés o la agitación.
- 3Ambos pueden causar somnolencia o somnolencia como efecto secundario.
- 4Ambas son sustancias reguladas que requieren una receta de un proveedor de atención médica autorizado.
- 5Ambos pueden crear hábito si se usan incorrectamente o durante un período prolongado de tiempo.
¿Cuál es la diferencia?
- 1Uso: Los sedantes se utilizan normalmente para inducir el sueño o la relajación, mientras que los tranquilizantes se utilizan más comúnmente para tratar la ansiedad o la agitación.
- 2Efectividad: Los tranquilizantes tienden a ser más fuertes y efectivos para reducir la ansiedad o el estrés que los sedantes.
- 3Efectos secundarios: Los sedantes son más propensos a causar somnolencia o deterioro de la coordinación, mientras que los tranquilizantes pueden causar mareos o confusión.
- 4Duración: Los sedantes tienden a tener una duración de acción más corta que los tranquilizantes, que pueden durar varias horas.
- 5Potencial de adicción: Por lo general, se considera que los tranquilizantes tienen un mayor riesgo de adicción o dependencia que los sedantes.
¡Recuérdalo!
El sedante y el tranquilizante son medicamentos que tienen un efecto calmante en la mente y el cuerpo. Sin embargo, los sedantes se usan típicamente para inducir el sueño o la relajación, mientras que los tranquilizantes se usan más comúnmente para tratar la ansiedad o la agitación. Los tranquilizantes tienden a ser más fuertes y efectivos para reducir la ansiedad o el estrés que los sedantes, pero también tienen un mayor riesgo de adicción o dependencia.